Algunas organizaciones con estructuras más o menos estables que
dicen querer horizontalizar su organigrama se envuelven en planificaciones de
cambio que son absolutamente desproporcionadas:
Adónde queremos llegar,
cuál es el escenario final, en cuánto tiempo queremos conseguir alcanzar
ese objetivo, cómo organizamos la participación de las personas en el diagnóstico
inicial, cómo priorizamos las acciones, cuál va a ser la metodología de
implantación,…
Si una organización quiere horziontalizar su estructura, en
mi opinión hay una acción sencilla, rápida y eficaz: compartir la información
con todas las personas de la organización.
En la medida en que las personas dispongan de información
relevante se sentirán importantes, serán capaces de tomar buenas decisiones, no
necesitarán de una información superior, atenderán a sus clientes de manera
autónoma.
No hay que tocar la estructura sino mantener informadas a
las personas.