Estoy pensando en una organización que tiene implantados, en funcionamiento, una serie de procesos, algunos de ellos internos (por ejemplo formación, acogida, …) y otros de ellos externos (gestión de alianzas, gestión de proveedores,…). Esos procesos tienen varios ciclos de mejora, es decir, se han revisado y mejorado varias veces, de modo que ya tienen una eficacia interesante.
Tal y como digo, a esta eficacia se puede llegar a base de revisar y mejorar pero me gustaría poner en el tapete otra consideración. Yo creo que a estos procesos se les puede dar otro toque, que incluso puede recortar el tiempo para alcanzar una buena eficacia, y que se trata de la relación personal. Invertir en mejorar la relación entre las personas estoy convencido hasta que puede hacer eficaz un proceso no tan bueno. Un proceso normal pero una excelente relación entre las personas puede dar como resultado logros muy interesantes.
Imaginaros el proceso de gestión de alianzas. Una buena relación entre las personas de las organizaciones aliadas puede acelerar su eficacia, es decir, que se consigan los objetivos mucho más rápidamente que si es una relación, vamos a decir menos cercana y más profesional.
Yo creo que es clave tener siempre presente que una buena relación personal nos va a ayudar a que la eficacia de los procesos aumente cualitativamente.
Una buena relación, sinceridad, credibilidad, cercanía, respeto, profesionalidad, generosidad.
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